Efectos psíquicos e ideales

Rómulo Lander

Primero

Los efectos psíquicos producidos por la interrupción voluntaria de un embarazo van a depender del ‘sistema de ideales’ que operan en ese sujeto. Estos ideales ya sean a predominio narcisista [Yo-ideal] o a predominio edípico [Ideal del Yo] producirán diversos tipos de sentimientos de culpa inconscientes, auto reproches conscientes y estados variados de angustia, que van a depender de las vicisitudes de la infancia del sujeto [eventos que han influido en la formación de esos ideales]. Los efectos mentales producidos por la penalización del orden social o religioso son –para mí entender– de orden secundario.

Acto

singularidad

Segundo

En la diatriba de la ‘interrupción voluntaria de un embarazo’ el analista se enfrenta a su capacidad de mantener el ‘lugar del analista’ en el proceso analítico. Esto refiere a su capacidad de mantener la neutralidad y la ausencia de juicio de valor. Esta capacidad va a ser –puesta a prueba– cada vez que aparece la ‘crisis ética’ en el análisis. Esta crisis aparece ante la posibilidad de un acto del analizando que implica vida, muerte y delito. En esos momentos la capacidad del analista de mantener su ‘lugar analítico’ es sometida a una prueba. La instalación de esta capacidad en el analista va a depender de su  análisis previo ‘profundo y satisfactorio’ que lo capacita para mantener la alteridad con el otro. El acto a realizarse es exclusivo del analizando. El analista al ‘ocupar su lugar’ ayuda con su ‘escucha privilegiada’ y sus ‘preguntas analíticas oportunas’ a que el analizando explore y conozca las razones de su acto.